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En el Informe sobre la Brecha de Emisiones 2024 se concluyó que el mundo debe prometer y hacer realidad la reducción del 42% de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero de aquí a 2030 mediante la próxima ronda de compromisos climáticos de los países, conocidos como Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (CDN). Si no lo hacen, el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5°C para el año 2100 será imposible de alcanzar. Con base en las políticas actuales, las proyecciones indican un devastador aumento de temperatura de entre 2,6 °C y 3,1°C durante este siglo. En el informe se hace un llamado a los grandes emisores del G20 para que asuman la mayor parte del trabajo pesado en lo que respecta a acciones de reducción de emisiones.
El Informe sobre la Brecha de Adaptación 2024 concluyó con un llamamiento mundial a incrementar masivamente el apoyo financiero en favor de las naciones en desarrollo que se enfrentan a sequías, inundaciones y otras inclemencias relativas al cambio climático. El informe fue citado en una decisión histórica en la Conferencia de Cambio Climático de la ONU (COP29) por la cual se acordó triplicar la financiación relacionada con el clima en favor de los países en desarrollo. Las representaciones de Bulgaria, Kenya y Tonga, entre otras, hicieron referencia a los informes del PNUMA sobre las brechas climáticas durante la COP29. A la fecha, estas publicaciones científicas se mencionaron en más de 3.000 noticias en más de 90 países.
En el informe Resourcing the Energy Transition se presentaron siete principios rectores y cinco recomendaciones para garantizar la justicia, la equidad y la sostenibilidad en el suministro sostenible y circular de los minerales críticos para la transición energética. Si aplican las recomendaciones del informe en materia de extracción, comercio, uso y eliminación de minerales y metales, los países pueden ayudar a reducir las emisiones, proteger la naturaleza, reducir la pobreza energética, gestionar la demanda, orientar la oferta y aumentar los ingresos de los países productores y la participación financiera de las comunidades locales en dichos ingresos. Estas recomendaciones fueron elaboradas por el Panel del Secretario General de las Naciones Unidas sobre los Minerales Críticos para la Transición Energética, su informe informó las decisiones de la Asamblea General de la ONU, el G20 y las cumbres de la ONU sobre biodiversidad y cambio climático.
Según el informe Panorama de los Recursos Globales 2024, la extracción de recursos naturales se ha triplicado en los últimos 50 años, lo que ha agravado la triple crisis planetaria. El informe, que aboga por una gestión sostenible de los recursos, fue citado en una resolución sobre energías renovables del Consejo de la Unión Europea y se mencionó en una resolución de la UNEA-6.
La Evaluación Mundial del Óxido Nitroso demostró cómo el mundo podrá reducir en un 40% las emisiones de óxido nitroso, un potente gas de efecto invernadero que además perjudica la capa de ozono y contamina el aire. Si se reduce dicha cantidad de emisiones, se podrían evitar 20 millones de muertes prematuras de aquí a 2050. Las conclusiones del informe se presentaron en la COP29 y recibieron cobertura en los medios de comunicación de todo el mundo.