Rotterdam, 10 de mayo de 2016 - El costo de adaptación al cambio climático en los países en desarrollo podría ascender a entre 280 y 500 mil millones de dólares por año en 2050, una cifra que es cuatro o cinco veces mayor que las estimaciones previas, según un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA, presentado este martes.
Publicado en momentos en que los países firman el Acuerdo de París sobre cambio climático, el informe evalúa la diferencia entre los costos financieros de la adaptación al cambio climático en los países en desarrollo y la cantidad de dinero realmente disponible para cubrir estos costos, una diferencia conocida como la "brecha de financiación para la adaptación”.
El Informe sobre la brecha de adaptación, escrito por 15 autores de 15 instituciones y revisado por 31 expertos, fue presentado durante una conferencia sobre vulnerabilidad, impactos y adaptación al cambio climático en Rotterdam.
El informe, el segundo en la serie sobre la brecha de adaptación del PNUMA, considera que la financiación bilateral y multilateral total para la adaptación al cambio climático en los países en desarrollo ha aumentado sustancialmente en los cinco años previos a 2014, alcanzando 22,5 mil millones de dólares. Sin embargo, advierte que a pesar de este aumento, habrá un importante déficit de fondos para el año 2050, a menos que estén disponibles nuevas y adicionales formas de financiación para la adaptación al cambio climático.
"Es vital que los gobiernos comprendan los costos que implica la adaptación al cambio climático", dijo Ibrahim Thiaw, Director Ejecutivo Adjunto del PNUMA.
"Este informe sirve como un importante recordatorio de que el cambio climático seguirá teniendo graves costos económicos. La brecha de financiación para la adaptación es grande, y es probable que crezca sustancialmente en las próximas décadas, a menos que se logre un avance significativo que asegure financiamiento nuevo, adicional e innovador para la adaptación", señaló Thiaw.
Las estimaciones anteriores sitúan el costo de la adaptación al cambio climático entre 70 mil y 100 mil millones de dólares anuales para el período 2010-2050, una cifra basada en un estudio del Banco Mundial de 2010.
El Informe sobre la brecha de adaptación analiza estas estimaciones previas, mediante la revisión de estudios nacionales y sectoriales. Como resultado, la publicación del PNUMA indica que es probable que dichas cifras previas sean una significativa subestimación. El verdadero costo de la adaptación al cambio climático en los países en desarrollo podría oscilar entre 140 y 300 mil millones de dólares por año en 2030, y entre 280 y 500 mil millones de dólares por año al llegar al 2050, señala el documento.
Los costos de adaptación podrían aumentar considerablemente con el tiempo, incluso si el mundo consigue limitar el aumento global de la temperatura por debajo de los dos grados centígrados para el año 2100, advierte el informe. Para los escenarios con mayor calentamiento global, las estimaciones de los costos de adaptación en los países en desarrollo son más altos, incluso en los primeros años, según el informe.
La Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, CMNUCC, ha pedido a los países desarrollados proporcionar 100 mil millones de dólares al año en 2020 para ayudar a los países en desarrollo a mitigar el cambio climático y adaptarse a sus impactos, como la sequía, el aumento del nivel del mar y las inundaciones.
Sin embargo, el informe del PNUMA señala: "No hay acuerdo en cuanto al tipo de financiación que deberá movilizarse para cumplir con este objetivo. Esto dificulta los esfuerzos para monitorear el progreso hacia el cumplimiento de la meta”. El informe hace notoria la necesidad de una correcta medición, seguimiento, y un sistema de reporte de inversiones de adaptación, para garantizar que la financiación se utilice de forma eficiente y enfocada donde más se necesita.
El informe señala que, mientras que los fondos especiales para el clima están rompiendo las barreras de la inversión en proyectos de adaptación en los países en desarrollo, las contribuciones a estos fondos son bajas en comparación con aquellas hechas a los fondos para mitigar el cambio climático.
El Fondo Verde para el Clima, establecido por la Convención Marco, tiene como objetivo dividir sus fondos en partes iguales entre los esfuerzos de mitigación y los de adaptación y se espera que juegue un papel significativo en los esfuerzos para financiar la adaptación, según el informe.
"Para satisfacer las necesidades financieras y evitar una brecha de financiación, el total de los fondos para la adaptación tendrían que ser, en 2030, aproximadamente de seis a 13 veces mayores que la financiación pública internacional hoy en día", señala el informe.
Los costos de adaptación son ya dos a tres veces más altos que la financiación pública internacional actual para la adaptación, según el informe. Cerrar esta brecha será crucial, si el mundo piensa abordar las necesidades futuras de adaptación, especialmente en los países en desarrollo.
El Acuerdo de París sobre el cambio climático, que 195 países negociaron en diciembre, incluye varias disposiciones fundamentales destinadas a promover la adaptación. Tres son particularmente trascendentales: la adopción de un objetivo global en materia de adaptación, el compromiso de aumentar la financiación de los países desarrollados para los países en desarrollo y el requerimiento de que todas las partes deberán elaborar y actualizar periódicamente los planes y estrategias de adaptación.
En un movimiento sin precedentes, el Acuerdo de París también llama a un equilibrio entre la financiación a la adaptación y a la mitigación, con el objetivo de satisfacer la demanda de ya larga data de los países en desarrollo por financiación para la adaptación.
Contacto de prensa:
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
María Amparo Lasso, Jefa Regional de Comunicaciones para América Latina y el Caribe, maria.lasso@pnuma.org, (+507) 305-3164.