Los ecosistemas incluyen bosques, manglares, humedales, arrecifes de coral, dunas de arena, etc. que pueden ayudar a prevenir o mitigar los riesgos: los bosques de montaña reducen el riesgo de aludes y deslizamientos de tierra. Los ecosistemas saludables reducen la vulnerabilidad de las personas a los desastres mediante el apoyo a los medios de vida y la satisfacción de las necesidades básicas de alimento, agua, combustible y refugio. Los ecosistemas permiten a las comunidades y a los países vulnerables ser más resistentes a los desastres.
El Programa de la ONU para el Medio Ambiente (PNUMA) trabaja para promover el medio ambiente como una solución de reducción de riesgo de desastres. Promover enfoques basados en ecosistemas, la gestión de cuencas hidrográficas, el manejo de zonas costeras y la gestión de áreas protegidas son medios para reducir el riesgo de desastres y aumentar la resiliencia de las comunidades y los países vulnerables
El PNUMA trabaja para promover soluciones ambientales para la reducción del riesgo y asegurar que esas soluciones se reflejen en marcos y estándares mundiales.
La organización también ha desarrollado enfoques de RRD basados en los ecosistemas y formación con universidades para fortalecer la enseñanza de postgrado en temas ambientales.
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En Haití, el PNUMA, con el apoyo de la Comisión Europea, promueve la gestión sostenible de las zonas costeras para mejorar los medios de vida locales y reducir el riesgo de desastres. Asimismo, apoya a los gobiernos locales y comunidades a utilizar enfoques de conservación costera para protegerse de las mareas y tormentas, así como de deslizamientos de tierra y erosión en las colinas vecinas que ponen a las comunidades y el medio ambiente marino en riesgo.
El PNUMA planea ampliar este enfoque a otros países y ecosistemas en América Latina y el Caribe.
