El uso de la tecnología multiplica los riesgos y las oportunidades para el planeta Tierra y sus habitantes. Es clave liberar su potencial y garantizar al mismo tiempo una digitalización sostenible.
Las tecnologías digitales pueden catalizar el progreso hacia los objetivos ambientales de la Agenda 2030, pero trae riesgos. Si bien la digitalización crea oportunidades al aumentar la disponibilidad de datos ambientales y permitir soluciones innovadoras, también conlleva riesgos ambientales relacionados con la contaminación y el consumo excesivo de recursos naturales, entre otros. El PNUMA trabaja para garantizar que las tecnologías digitales y la infraestructura pública digital en todo el mundo contribuyan a promover la sostenibilidad ambiental y sean sostenibles desde su concepción.
Adoptamos un enfoque sistémico: fomentamos infraestructuras, normas e incentivos digitales centrados en la sostenibilidad y fomentamos soluciones tecnológicas a los complejos desafíos ambientales.
Colabóranos para crear datos ambientales e infraestructuras digitales accesibles, respaldar normas sostenibles y tecnologías transformadoras, y promover la alfabetización digital global en pro del medio ambiente.