Con sus embriagadores mercados de especias al aire libre, unos impresionantes paisajes en los que el desierto del Sáhara contrasta con el macizo del Atlas y su deslumbrante arquitectura antigua, Marruecos tiene un encanto singular. Sin embargo, al igual que la mayoría de los países en desarrollo, debe lidiar con los problemas derivados de la rápida modernización, entre ellos las amenazas a la salud pública causadas por el aumento de la aplicación de plaguicidas de uso en salud e higiene públicas.
En respuesta a este problema, el Gobierno de Marruecos se está embarcando en un proyecto polifacético de tres años de duración con el Programa de Gestión de los Productos Químicos y los Desechos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) con el fin de fortalecer su capacidad institucional para gestionar los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas. El proyecto, gracias al cual la salud de los 36 millones de habitantes del país estará mejor protegida, permitirá a Marruecos cumplir sus obligaciones en cuanto Parte de los Convenios de Basilea, Estocolmo y Rotterdam y el Convenio de Minamata, instrumentos de protección de las Naciones Unidas que tratan aspectos fundamentales de la gestión de los productos químicos y los desechos.
Impulso a la capacitación y el apoyo técnico
Los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas, como los insecticidas, los rodenticidas y los desinfectantes, se utilizan para controlar las enfermedades transmitidas por vectores y plagas molestas, pero constituyen un riesgo importante para la salud humana y ambiental. El fortalecimiento de la normativa sobre estos productos químicos, un mayor conocimiento de sus riesgos y una mejor gestión tendrán importantes repercusiones positivas en la salud pública.
El Comité Técnico de Evaluación de Plaguicidas de Marruecos, que desempeña una función fundamental en la regulación de los plaguicidas, no ha recibido la capacitación y el apoyo técnico necesarios para cumplir sus responsabilidades. Su falta de conocimientos actualizados acerca de las mejores prácticas de gestión de los plaguicidas ha abierto una vía para la importación y el uso generalizado de plaguicidas peligrosos en el país.
Otro problema es que, si bien Marruecos cuenta con un sistema de notificación de intoxicaciones por plaguicidas, no hay información suficiente para establecer el tipo de plaguicidas que están en el origen de esas intoxicaciones, incluidos los que podrían considerarse altamente peligrosos. Por ello, aunque aproximadamente 1.285 personas sufren intoxicaciones por plaguicidas cada año, no hay datos suficientes para relacionarlas con los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas.
Este problema se ve agravado por los deficientes controles en las fronteras de Marruecos para detectar y registrar los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas importados al país. Igual de problemático es que los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas se acumulan año tras año tanto en los servicios de salud como en las oficinas municipales de higiene, y la eliminación de los envases vacíos de estos plaguicidas no se gestiona adecuadamente.
Asociación con el PNUMA
El primer objetivo del proyecto es fortalecer la capacidad del Comité Técnico de Evaluación de Plaguicidas para cumplir los convenios internacionales, de modo que pueda salvaguardar mejor la salud
pública. En el marco de esta iniciativa, los miembros del Comité se beneficiarán de las visitas técnicas a colegas internacionales reconocidos por la gestión eficaz de los plaguicidas.
Con esta capacitación, los miembros del Comité estarán en condiciones de actualizar el procedimiento por el que Marruecos autoriza la importación, fabricación y comercialización de formulaciones de plaguicidas de uso en salud e higiene públicas por parte de empresas privadas. Estos procedimientos actualizados son esenciales para evitar que plaguicidas potencialmente peligrosos vayan a parar al público.
Otra piedra angular del proyecto es la mejora de la normativa que deben cumplir las empresas del sector privado. Como estas empresas venden o utilizan plaguicidas de uso en salud e higiene públicas, también son responsables de proteger la salud pública.
Por ejemplo, los equipos de aspersión de plaguicidas no están actualmente sujetos a ningún control y verificación. Para subsanar esta y otras lagunas en la gestión de los plaguicidas, un grupo de trabajo creado por el Gobierno elaborará una norma nacional para los equipos de aspersión de plaguicidas, redactará procedimientos de aprobación para las empresas pertinentes y establecerá directrices para el almacenamiento, etiquetado y envasado de plaguicidas de higiene y salud pública.
Mejora de la gestión
El Gobierno marroquí aprovechará este impulso para llevar a cabo, por conducto del Ministerio de Salud, una encuesta nacional que determine los tipos de plaguicidas altamente peligrosos, tanto de uso agrícola como público, que circulan en el país. Esto es fundamental para establecer la incidencia de los efectos adversos en la salud humana relacionados con los plaguicidas, en particular la intoxicación. Una vez validada la lista, el Gobierno prohibirá los que se consideren altamente peligrosos.
Provisto de una lista de plaguicidas altamente peligrosos, Marruecos podrá cumplir otro de los objetivos principales del proyecto: elaborar y aplicar procedimientos de control de los plaguicidas de uso en salud e higiene públicas en la importación. El fortalecimiento de sus procedimientos de importación ayudará a que el Gobierno evite aceptar de forma involuntaria plaguicidas prohibidos que puedan haber sido enviados por países desarrollados como medio de eliminación o para venderlos a empresas privadas.
Un objetivo igualmente importante del proyecto es aumentar la capacidad del personal del Ministerio de Salud para concienciar tanto al sector público como privado acerca de la gestión adecuada de los plaguicidas. En el marco de este objetivo, se elaborará una guía detallada para ayudar al personal a realizar campañas de sensibilización exitosas. Este recurso se complementará con una guía de gestión centrada en la recogida y resguardo en condiciones de seguridad de las existencias obsoletas de plaguicidas de uso en salud e higiene públicas.
Gracias a estas iniciativas, el Gobierno de Marruecos aumentará de manera considerable su capacidad de gestión de los plaguicidas y otras sustancias químicas potencialmente nocivas, en aras de la salud pública.
Si desea más información, no dude en dirigirse a la Secretaría del Programa Especial en unepchemicalsspecialprogramme@un.org