Photo: UNEP
16 Feb 2022 Chemicals & pollution action

Mongolia crea capacidad para analizar la contaminación química del suelo y el agua

Photo: UNEP

Con una superficie de 1,5 millones de kilómetros cuadrados en los que apenas viven 3,3 millones de personas, Mongolia es el país más escasamente poblado del mundo1. En las tres últimas décadas ha experimentado un rápido proceso de urbanización y desarrollo industrial , en particular en su capital, Ulaanbaatar, donde se calcula que reside el 40 % de sus habitantes.

Sin embargo, este crecimiento no ha ido acompañado de estrategias adecuadas de gestión de los productos químicos y los desechos, lo que ha creado graves amenazas para el medio ambiente y la salud humana desde las ciudades del país hasta su extenso campo.

El Gobierno de Mongolia calcula que su generación de desechos peligrosos es de 27.000 a 54.000 toneladas al año, y que gran parte de estos desechos no se eliminan de manera correcta. Como Parte en los Convenios de Basilea, Estocolmo y Rotterdam, así como del Convenio de Minamata, Mongolia se ha comprometido a avanzar en la buena dirección. Su proyecto, de reciente puesta en marcha y respaldado por el Programa de Gestión de los Productos Químicos y los Desechos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), representa un paso concreto hacia el cumplimiento de sus obligaciones en virtud de esos acuerdos y la garantía de un futuro sostenible para sus ciudadanos.

El primer objetivo del proyecto, de tres años de duración, es examinar la situación actual de la producción y la gestión de los desechos peligrosos, determinando qué tipos de desechos se generan y cómo se tratan y eliminan.

Estos pormenores se documentarán en los hogares, las dependencias comerciales, las instituciones, las industrias, la producción agrícola, la construcción y las instalaciones de eliminación y tratamiento. En el marco de este examen, también se llevarán a cabo análisis basados en el género para comprender mejor cómo el género influye en la vulnerabilidad frente a los efectos peligrosos.

Esta actividad inicial del proyecto ayudará a determinar los datos de referencia sobre los desechos peligrosos del país y sus efectos en la población, lo que es fundamental para adoptar decisiones eficaces en materia de políticas en torno a la gestión de los desechos. En 2013 la Academia de Ciencias de Mongolia creó un laboratorio analítico en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial. Entre otras cosas, ese laboratorio trabaja en el análisis de los bifenilos policlorados (PCB) presentes en los aceites que se usan para aislar los equipos eléctricos. También sigue de cerca los esfuerzos por mitigar la contaminación por PCB de los equipos utilizados en Mongolia.

A través de este proyecto, Mongolia está trabajando para ampliar la capacidad del laboratorio, elaborando normas y métodos nacionales de muestreo y análisis de desechos peligrosos, como los plaguicidas peligrosos en el suelo y el agua.

Este crecimiento institucional será posible aprendiendo de las experiencias y mejores prácticas de otros países y formando a los investigadores nacionales para que mejoren sus capacidades de muestreo y análisis.

El tercer objetivo principal del proyecto es la concienciación y la capacitación de los interesados responsables de la gestión de desechos peligrosos, incluidos los representantes de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, industrias, empresas, institutos académicos y comunidades.

Ello se logrará mediante la organización de talleres de formación, labor práctica sobre el terreno, instrumentos en línea y la difusión de materiales de capacitación y folletos. Los temas principales incluirán: un examen de los datos de referencia sobre la gestión de los desechos peligrosos en el país; tipos y fuentes de desechos peligrosos, así como opciones para su eliminación y tratamiento; mejores prácticas internacionales; y requisitos jurídicos de los convenios internacionales que el país ha ratificado.

Tras la formación, estos interesados estarán empoderados para difundir conocimientos sobre la gestión de los desechos peligrosos entre las personas de sus esferas específicas de actividad o responsabilidad.

En el marco del compromiso del PNUMA y el Gobierno de Mongolia de garantizar la equidad de género en este proyecto, se enlazarán consideraciones de género con todas las actividades. El equipo del proyecto recopilará datos que contribuyan a trazar una imagen más nítida de cómo los desechos peligrosos podrían afectar a mujeres y hombres de manera diferente.

Como iniciativa transversal especial, se pondrá a prueba un enfoque de gestión participativa de los desechos peligrosos en una zona comunitaria. El proyecto se esforzará por conseguir una participación igualitaria entre mujeres y hombres, con el objetivo a largo plazo de reducir los efectos que las mujeres pueden padecer de manera desproporcionada como consecuencia de la mala gestión de los desechos peligrosos.

Al término del proyecto, Mongolia confía en que los efectos de sus esfuerzos por proteger a las comunidades y los recursos naturales se dejen sentir entre las personas y la vida silvestre de su extensa geografía.

Si desea más información, no dude en dirigirse a la Secretaría del Programa Especial en unepchemicalsspecialprogramme@un.org

 

1 https://www.mn.undp.org/content/mongolia/en/home/countryinfo.html#:~:text=Mongolia%2C%20with%20a%20….