Desde prohibir el uso de sorbetes de plástico desechables, hasta promover un diseño ecológico innovador, los esfuerzos para frenar la contaminación por plásticos son tan variados y están tan extendidos por el mundo como el propio plástico. Pero a pesar de los esfuerzos, el problema no ha desaparecido. Es hora de adoptar una nueva estrategia.
La Guía nacional para identificar puntos críticos de contaminación por plásticos y desarrollar planes de acción es un manual para que los países, regiones y ciudades diseñen planes estratégicos para combatir este tipo de contaminación.
La guía, elaborada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y la Iniciativa de Ciclo de Vida, proporciona métodos para identificar los puntos críticos de vertido del plástico, encontrar sus impactos a lo largo de la cadena de valor del plástico y priorizar las acciones.
Un punto crítico se define como un componente del sistema que contribuye directa o indirectamente al vertido y al impacto de los plásticos, o sobre el cual se puede actuar para mitigar estas fugas o sus efectos.
“Cuando un barco se hunde, se debe encontrar la fuente de la fuga y repararla. Lo mismo ocurre con la contaminación por plásticos. Necesitamos abordar el problema en su origen. Esperamos que esta guía sea útil para gobiernos y otras partes interesadas que quieran dar forma a sus estrategias con el fin de abordar el desafío del plástico y mejorar la circularidad en la cadena de valor de este material", dijo Ligia Noronha, directora de la División de Economía del PNUMA.
Específicamente, la guía proporciona un marco metodológico replicable y armonizado que permite a los actores a nivel nacional, subnacional y local identificar las fugas de plástico y los impactos asociados, e implementar las acciones apropiadas. También permite el desarrollo de criterios básicos nacionales y subnacionales, de modo que se pueda monitorear la contaminación por plásticos y evaluar el éxito de las intervenciones. Además de la guía, en una etapa posterior se publicarán módulos y herramientas para ayudar a los usuarios a recopilar datos, crear modelos, realizar cálculos y desarrollar intervenciones.
“Necesitamos abordar el problema en su origen”.
“La metodología permite dar seguimiento al consumo de plástico en varios sectores como salud, agricultura y alimentación, logística y transporte, así como en los hogares, con el fin de desarrollar soluciones para reducir los impactos adversos. Ofrece una interfaz eficaz entre las evaluaciones basadas en la ciencia y la formulación de políticas. Los países y las ciudades pueden utilizar la guía para cerrar esa brecha de conocimiento, encontrar las fuentes de origen de la contaminación por plásticos e identificar soluciones", dijo Stewart Maginnis, director global del Grupo de Soluciones basadas en la Naturaleza de la UICN.
La guía contribuye al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en particular, el ODS 12 sobre patrones de consumo y producción sostenibles y el ODS 14 para el uso sostenible y la conservación de los servicios y recursos oceánicos.
También apoya la implementación de las resoluciones aprobadas en la cuarta sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, en marzo de 2019, incluidas las resolucións sobre vías innovadoras para lograr el consumo y la producción sostenibles, basura plástica y microplásticos marinos y contaminación causada por productos de plástico desechables.
El proyecto de Plásticos Marinos y Comunidades Costeras de la UICN implementó una serie de talleres nacionales en Tailandia, Vietnam, Sudáfrica, Kenia y Mozambique desde diciembre de 2019 hasta marzo de 2020, en los cuales se aplicó la prueba piloto de la guía. Los resultados de esta experiencia estarán disponibles finales de 2020, lo que contribuirá a mejorar la guía y las herramientas pertinentes.
Sobre la base la guía, el PNUMA y la UICN se han comprometido a mejorar aún más la armonización de la metodología a nivel mundial junto con socios y partes interesadas, al tiempo que apoyan la recopilación y el intercambio de datos para abordar la contaminación por plásticos.