El 10 de diciembre de cada año, se celebra el Día de los Derechos Humanos. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) apoya el reconocimiento, la promoción y la aplicación de los derechos humanos relacionados con el medio ambiente en un enfoque multifacético, incluso mediante la Iniciativa de Derechos Ambientales, que comprende los avances emprendidos por el PNUMA y sus asociados para promover, proteger y respetar las obligaciones de derechos humanos relacionados con el disfrute de un medio ambiente seguro, limpio, saludable y sostenible.
Este año, exploramos cómo una de las Campeones de la Tierra 2021 está abogando por el derecho a un medio ambiente saludable a través de la sensibilización pública sobre la contaminación del aire.
Si una imagen vale más que mil palabras, para Maria Kolesnikova, Campeona de la Tierra de este año en la categoría Visión emprendedora, una imagen fue suficiente para comenzar un movimiento.
Era 2016 y Kolesnikova —una profesional de relaciones públicas que entonces tenía 28 años— era voluntaria de MoveGreen, una organización ambiental dirigida por jóvenes en Kirguistán.
Fue allí donde alguien le mostró una foto de Bishkek desde las montañas que rodean la capital de Kirguistán. "No se podía ver la ciudad", relató. "Bishkek estaba cubierto con una manta gris. No sabíamos cómo llamarlo, lo que sí sabíamos es que era realmente malo", relata.
Bishkek, hogar de aproximadamente 1 millón de personas, se encuentra entre las ciudades del mundo con los niveles más severos de contaminación del aire. Durante los meses de invierno, a menudo la urbe queda atrapada bajo una cúpula de smog derivada tanto de su entorno natural (la temperatura de la ciudad es, en promedio, 5°C más cálida que sus alrededores) como del humo proveniente del carbón utilizado para calentar la mayoría de los hogares.
"Queríamos entender más sobre lo que había en el aire que estábamos respirando y qué datos estaba recopilando la ciudad para tratar de mejorar las cosas", explica Kolesnikova.
"Pero no encontramos ningún dato relevante y concreto, ya fuera porque no se recopilaba o porque no se compartía. Entonces, decidimos generar nuestros propios datos", relata.
Un modesto comienzo
MoveGreen comenzó con solo tres sensores para medir la calidad del aire, monitoreando por primera vez en la República Kirguisa los niveles de partículas finas (PM 2.5) producidas por la quema de carbón y otros combustibles, la combustión y el polvo. Estas concentraciones pueden causar inflamación de los pulmones y otras enfermedades respiratorias. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la contaminación del aire causa hasta 7 millones de muertes cada año.
Cuando Kolesnikova y el equipo de MoveGreen obtuvieron los resultados de las primeras mediciones, tomaron una decisión audaz. Iniciaron una campaña llamada "La escuela respira fácilmente" y llevaron su mensaje a una población que estaba lista para escuchar: los escolares de Bishkek.
A nivel mundial, el 93% de los niños viven en entornos donde los niveles de contaminación del aire están por encima de las directrices de la OMS. Alrededor de 600.000 niños mueren prematuramente cada año debido a la contaminación del aire. La exposición al aire sucio también puede afectar el desarrollo cognitivo y motor, y aumenta el riesgo de que los niños padezcan enfermedades crónicas en el futuro.
En Bishkek se instalaron sensores en las escuelas para medir la calidad del aire, de manera que en las aulas se pudiera mantener las ventanas cerradas cuando la contaminación del aire fuera alta. Los educadores también utilizaron los datos para advertir a los padres sobre cómo evitar que sus hijos queden expuestos a las partículas finas. Hoy en día, hay más de 100 sensores instalados en la ciudad y la región.
El éxito de la campaña que inició en las escuelas alentó a continuar a Kolesnikova, quien en ese momento se había convertido en la directora de MoveGreen. No bastaba con recopilar los datos; se necesitaba un movimiento para convencer a los responsables de la toma de decisiones de mejorar la calidad del aire de Bishkek.
MoveGreen desarrolló una aplicación, ahora disponible en todo el mundo, llamada AQ.kg, un recopilador y transmisor de datos sobre la calidad del aire. La aplicación agrega datos cada una a tres horas de las dos ciudades más grandes de Kirguistán, Bishkek y Osh, sobre la concentración de contaminantes en el aire, incluido el dióxido de nitrógeno, el material particulado fino (PM 2.5) y las partículas gruesas (PM 10).
"Nuestros datos y métodos han sido cuestionados por aquellos que dicen que los datos provenientes del monitoreo ciudadano no son confiables. Pero seguimos teniendo reuniones y seguimos insistiendo, y ahora nos escuchan. La conexión con el gobierno ha ayudado a desarrollar nuestro trabajo para mejorar el monitoreo ambiental en Bishkek, para hacer un mejor seguimiento y reducir las emisiones", dice Kolesnikova.
“El trabajo de Kolesnikova refleja cómo las personas y los ciudadanos pueden impulsar el cambio ambiental aprovechando el poder de la ciencia y los datos", resaltó Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
"A menudo, la gente se pregunta si hay algo que hacer para combatir la contaminación, el cambio climático y las otras amenazas para el planeta. Maria Kolesnikova demuestra que sí. Su dedicación es notable y muestra que todos podemos desempeñar un papel para poner al planeta en camino hacia un mejor futuro”, añadió Andersen.
La coronación de Kolesnikova como Campeona de la Tierra se produjo pocos días antes del Día de los Derechos Humanos, que se conmemora cada 10 de diciembre. Fue una coincidencia inesperada. De acuerdo al anuncio de las Naciones Unidas, realizado a principios de este año, tener un medio ambiente saludable y sostenible es un derecho humano, una posición que Kolesnikova apoya.
"Es nuestro derecho respirar aire limpio", declaró Kolesnikova.
Alguien tiene que asumir la responsabilidad del futuro. ¿Por qué no debería ser yo?
Planes futuros
Los planes de MoveGreen para los próximos meses incluyen pedir políticas a nivel municipal y nacional para desarrollar proyectos de ley que incluyan la realización de sesiones regulares de información pública sobre los resultados de las mediciones de la calidad del aire. La República Kirguisa se ha comprometido con los objetivos mundiales para luchar contra el cambio climático, incluido el objetivo no condicionado de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en más del 16% para 2025.
En Kirguistán existen inmensas oportunidades para las fuentes de energía alternativas; solo se ha desarrollado el 10% de su potencial hidroeléctrico, y, entre otras opciones de energía renovable, podrían incluirse el aumento del suministro de calefacción y electricidad a través de la energía eólica, solar y de biogás, un combustible que a menudo se produce a partir de desechos agrícolas.
Según Kolesnikova, si hubiera más inversión en el área científica en Kirguistán, el país podría diseñar sus propias soluciones y crear una sociedad más apegada a la ecología que coexista en armonía con la naturaleza, incluyendo las montañas que tanto ama la nueva Campeona de la Tierra.
Debido a que la contaminación del aire no entiende de fronteras, Kolesnikova y MoveGreen están entrando en acuerdos regionales con otros países de Asia Central. Su objetivo es convencer a los seis estados de la región para que colaboren en formas de abordar la contaminación del aire en sus ciudades. La puesta en marcha de sistemas y normas para evaluar la calidad del aire será fundamental. Un estudio reciente del PNUMA destacó que solo 57 países monitorean continuamente la calidad del aire, mientras que 104 no tienen infraestructura de monitoreo.
Kolesnikova dice que está impulsada por el deseo de hacer del mundo un lugar mejor.
"Muy a menudo puedes desmotivarte como activista: trabajas muy duro, no ves los resultados de tus esfuerzos y, finalmente, sientes que no quieres seguir adelante. Pero luego te das cuenta: no. Alguien tiene que asumir la responsabilidad del futuro. ¿Por qué no debería ser yo?".
Los premios Campeones de la Tierra y los Jóvenes Campeones de la Tierra del PNUMA honran a individuos, grupos y organizaciones cuyas acciones tienen un impacto transformador en el medio ambiente. Este premio es el máximo galardón ambiental de las Naciones Unidas y reconoce a líderes destacados de los gobiernos, la sociedad civil y el sector privado.
La página de monitoreo de contaminación del aire del PNUMA proporciona datos en tiempo real sobre la contaminación del aire en todo el mundo, su impacto en la salud humana y los esfuerzos nacionales para abordar este problema.